Bajo la montaña suiza: de la seguridad bancaria a la digital
Suiza es conocida ademas de por el chocolate y los relojes por ser el paraíso del secreto bancario. La protección de la esfera privada y el secreto al que están obligados sus banqueros está protegido en sus leyes desde 1934.
Otro gallo nos cantaría si a los dictadores y ladrones de todo pelo les desaparecieran los paraisos fiscales y se les levantaran las cuentas que guardan para cuando salgan de la carcel, los menos, y para su vidilla, los más.
Una buena noticia se produjo el pasado 13 de septiembre, cuando el parlamento suizo aprobó una ley que permite restituir los fondos ilícitos evadidos por un dictador al gobierno legítimo del país en cuestión y no a la familia del gobernante expoliador.
El primer beneficiado ha sido Haití, país que en enero sufrió un fuerte terremoto. Las arcas del país caribeño recibirán 4.400.000 euros, 7 millones de dólares, de las cuentas suizas congeladas de la familia Duvalier. «Papá Doc» y su hijo «Baby Doc» Duvalier detentaron el poder en Haití por espacio de 30 años (1956-1986) con ayuda de bandas armadas.
Suiza se veía a menudo obligada a devolver esos bienes ilícitos a las familias de los dictadores debido a la fragilidad del sistema jurídico del país afectado, como por ejemplo, sucedió en 2009 en la República Democrática del Congo, tras el fallecimiento del ex presidente congoleño, Mobutu Sese Seko.
El Gobierno suizo devolverá también a Nigeria 235 millones de euros correspondientes a las cuentas privadas del anterior dictador nigeriano, Sani Abacha.
Personalidades afectadas por la guerra contra la corrupción mundial
Una lista para sonreir:
- José Eduardo dos Santos, presidente de Angola – cien millones de dólares bloqueados
- Vladimiro Montesinos, exjefe de los servicios secretos peruanos – veinticuatro millones de euros bloqueados.
- Benazir Bhutto, exprimera ministra paquistaníes – entre cincuenta a ochenta millones de dólares bloqueados.
- Nursultan Nazarbaev, actual presidente de Kazakhstan – doscientos millones de dólares bloqueados.
- Ferdinand Marcos, fallecido, antiguo jefe de estado de Filipinas – depósitos en Ginebra, Zurich y Friburgo, por valor de seiscientos ochenta y tres millones de dólares; el dinero ya ha sido restituido a su país.
- Herederos de judíos victimas del nazismo – Suiza ha devuelto mil doscientos treinta y seis millones de euros.
Hasta el día de hoy, Suiza ha restituido un total de mil quinientos cuarenta y seis millones de dólares.
La información vale más que el dinero
Pero Suiza está dispuesta renovarse aplicando el conocimiento del secreto bancario a nuevos sectores. En concreto a todo lo relacionado con la economía digital y el secreto tecnológico.
Bajo algunas de las montañas más espectaculares del mundo se ocultan kilómetros de búnkeres a prueba de ataques nucleares, invasiones militares, desastres naturales y todo tipo de ataques terroristas que fueron construidos en la II Guerra Mundial y que, afortunadamente están en desuso.
En los Alpes, en el cantón de Berna, en las localidades de Saanen y en Zweisimmen, existen 2 auténticas ciudades dentro de las montañas conocidas como el Fort Knox suizo. Una inversión de miles de millones de euros que hoy en día nadie podría construir y que la Armada suiza ha empezado a explotar de forma conjunta con empresas privadas. SIAG la empresa que lo explota dice que «es la infraestructura más segura del mundo».
«La información es muy valiosa. En realidad, hoy en día el dinero no es más que datos la mayor parte del tiempo, anotaciones en una cuenta bancaria. »
No sólo los muy ricos pueden utilizar el servicio, se ofrecen servicios de back up para almacenar hasta un giga de información desde siete euros al mes. Y claro, como siempre la neutralidad suiza permite que los datos almacenados sean sometidos a la máxima garantía de seguridad de la información.
Lo dicho, la información siempre ha sido poder. Pero, ¿más que el dinero?.